Legado Hispano

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Del 15 de septiembre al 15 de octubre de cada año, celebramos el Mes Nacional de la Herencia Hispana. Este mes reconoce las contribuciones, el legado y las culturas de las diversas poblaciones hispanas y latinas de los Estados Unidos. En 1968, durante la presidencia de Johnson, se inició una celebración de una semana de duración. Veinte años después, el presidente Reagan la amplió a un mes. En Estados Unidos los hispanos y latinoamericanos es la población de mayor crecimiento -- Según la Oficina del Censo de los Estados Unidos (U.S. Census Bureau) uno de cada 4 niños son Hispanos o Latinos.

Mientras nos tomamos el tiempo para honrar las contribuciones de nuestros amigos, familiares y vecinos hispanos y latinos, debemos reconocer que los latinos que viven en los EE. UU. experimentan desigualdades desproporcionadas en materia de salud. La fuerza laboral de los EE. UU. incluyó a 29 millones de trabajadores hispanos y/o latinos en 2020. Se proyecta que los trabajadores hispanos representarán el 78 por ciento de los nuevos trabajadores netos entre 2020 y 2030. Casi la mitad de los empleados hispanos o latinos trabajan en la industria agrícola, pesquera y forestal. Muchos de estos trabajadores experimentan condiciones de trabajo inaceptables y peligrosas sin ninguna protección legal.

Además de las condiciones de trabajo peligrosas, los hispanos y latinos también tienden a sufrir otras afecciones de salud, como hipertensión, diabetes, obesidad, asma, enfermedades cardiovasculares y enfermedades renales crónicas, en tasas más altas que sus contrapartes blancas. Esta brecha de salud se atribuye a:

  • Falta de acceso a alimentos nutritivos y abundantes
  • Condiciones de vida duras e inseguras
  • Falta de acceso a atención médica física y mental adecuada
  • Condiciones de trabajo peligrosas.

Las barreras lingüísticas y las diferencias culturales agravan cada uno de estos desafíos individuales.

¿Cómo abordamos los desafíos que enfrentan los afiliados de nuestra comunidad hispana y/o latina?

La familia es primordial en la cultura latina. Las decisiones sobre salud y bienestar generalmente se discuten entre la familia. Para abordar con éxito los problemas y establecer un plan de tratamiento, se debe incluir este valor fundamental. Esto podría significar que la familia asista a las citas con el afiliado. El afiliado también puede necesitar tiempo entre las citas para discutir las opciones de tratamiento con sus seres queridos antes de seguir adelante con su proveedor.

Las culturas hispana y latina no son todas iguales. Si bien 21 países en todo el mundo tienen al español como idioma oficial, también hay una variedad de influencias culturales y lingüísticas indígenas y europeas entretejidas en todo el mundo hispanohablante. Un grupo específico que a menudo se deja fuera de la conversación sobre la identidad latina es el pueblo haitiano. Haití y la República Dominicana están ubicados en la isla de La Española en el Caribe. Los inmigrantes haitianos consideran a más de la mitad de los condados de Carolina del Norte como su hogar. En nuestra región, 34 de nuestros 46 condados son el hogar de inmigrantes haitianos. Por lo tanto, la competencia cultural en torno a las creencias y prácticas haitianas conducirá a una relación más efectiva entre proveedores y afiliados.

One of the absolute best ways to be effective in working with the Latino community is to get involved and create sincere relationships. This opens doors and provides opportunities. It creates trust that will then translate into better health outcomes. When working to address these health disparities, remember that cultural sensitivity and humility should be at the heart of the work we do. When cultural and linguistic barriers are kept in mind, we can effectively work together with our members to find solutions that are patient- and person-centered.

Una de las mejores maneras de trabajar eficazmente con la comunidad latina es involucrarse y crear relaciones sinceras. Esto abre puertas y brinda oportunidades. Crear confianza que luego se traducirá en mejores resultados de salud. Cuando trabajamos para abordar estas desigualdades de salud, recuerde que la sensibilidad cultural y la humildad deben ser el centro de nuestro trabajo. Cuando tenemos en cuenta las barreras culturales y lingüísticas, podemos trabajar eficazmente junto con nuestros afiliados para encontrar soluciones centradas en el paciente y la persona.